Abril 2. ¿Por qué confundimos dependencia con adicción?
top of page

Abril 2. ¿Por qué confundimos dependencia con adicción?


Conociendo a nuestra verdadera droga

Muy fácil. Porque se tiene la falsa idea de que dependencia afectiva significa adicción. ¿Por qué? Pues simplemente porque PARECE SERLO. Pero no lo es. Porque los dependientes emocionales no estamos enfermos. Tendré mucho cuidado en exponer esto.

Te repito que Yo pienso que la dependencia emocional no es una adicción. Y pienso esto basada en 14 años de trabajar fuertemente con mujeres y hombres dependientes emocionales que me han confirmado que no es una adicción porque es simplemente una manera de relacionarnos, dañina, tóxica y disfuncional (y que tiene sus orígenes en un proceso de individuación inexistente o defectuoso), pero una manera al fin. Y la conducta, y dentro de ésta la forma en la que nos relacionamos, siempre tiene su porqué y su para qué.

Sí. La conducta, -citando un principio terapéutico-, siempre quiere decir algo. Y eso que quiere decir casi nunca es consciente, pero está. La conducta es la punta del iceberg, mientras que el porqué de esa conducta es lo que no se ve arriba de la superficie, pero que es las cuatro quintas partes de lo que vemos. ¿A qué me refiero?


A que desde niños la mayoría de las personas que nos relacionamos deficientemente en la adolescencia y adultez hemos tenido un gran “por qué” (una razón) y otro gran “para qué” (un gran sentido) de por qué nos relacionamos como lo hacemos…

Pero ¿Por qué digo que no estamos enfermos? Sólo porque… No estamos enfermos.

Fragmento del libro

“Vivir Libre (Aprendiendo a no depender)”

Escrito por Gabriela Torres de Moroso Bussetti

Grupo Editorial Éxodo

ISBN 978-607-8543-09-1

Libro físico:


28 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page